En este pequeño artículo nuestra compañera María Eugenia González (@EuNutrición) esboza algunas líneas sobre la microbiota oral, esos pequeños bichos que viven en nuestra boca…
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No estamos solos. Parece que a la famosa frase de Ortega y Gasset ‘Yo soy yo, y mis circunstancias’ habría que añadirle todos los microorganismos que viven con nosotros en estrecha relación. Y algunos de ellos han encontrado en nuestra boca su hábitat.
Aunque ya sabemos que estéril no hay nada, ni siquiera el líquido amniótico, parece que la colonización de la cavidad oral se produce de forma mas trascendental a partir del parto, a través del contacto físico del niño con la microbiota vaginal y perineal de la madre.
Todos los conductos y cavidades del tubo digestivo, desde la boca al ano, poseen una microbiota característica y en la cavidad oral contamos con cientos de diferentes especies bacterianas, víricas y fúngicas. La heterogeneidad de la microbiota oral es muy amplia e incluso varía en las distintas zonas de la boca, así como de un individuo a otro y también a lo largo de vida. Por supuesto, algunos de estos microorganismos son autóctonos y otros alóctonos, pero permitidme que no me extienda en estos asuntos para no alargar el post mas de la cuenta.
Muchos de estos microorganismos se asocian formando biofilms, resistentes en muchos casos a antibióticos o al estrés. En este medio también se han descrito relaciones antagónicas, particularmente cuando existe competición por algún recurso. Además de los biofilms extracelulares existen comunidades microbianas intracelulares que invaden el epitelio de las células bucales, lo que refleja la continua comunicación entre nuestras células y las suyas.
Con algunos de ellos vivimos en simbiosis y nos aportan funciones beneficiosas como la prevención de la colonización de las superficies bucales por patógenos potenciales. Y aunque la mayoría son comensales pueden volverse patógenos si su hábitat cambia, incluyendo el caso de la higiene personal. De hecho, infecciones orales como la caries o las enfermedades periodontales resultarían de los cambios ocurridos en el equilibrio de la microbiota oral, como consecuencia de la modificación de las condiciones medioambientales locales.
Todavía no se han identificado todas las especies de la microbiota oral aunque se ha anticipado el dato de mas de 280 especies diferentes. Existen proyectos como ‘Saca la Lengua’ que estudian identificar la diversidad de bacterias y hongos presentes en la boca y su variabilidad entre los individuos.
¿Son útiles los probióticos para la salud oral?
En los últimos años los probióticos han demostrado su eficacia en algunos problemas digestivos como la diarrea aguda o la diarrea producida por los antibióticos. Esta eficacia está basada en el beneficio que producen estos productos sobre la microbiología del intestino. Parece lógico pensar que los probióticos también pueden ejercer un efecto beneficioso sobre la microbiología oral y ayudar en el manejo de enfermedades de la boca, ya que muchas de las patologías orales tienen su origen en cambios de la microbiota.
En el caso de la caries, ciertas bacterias potencialmente patógenas aumentan progresivamente en cantidad hasta producir un desequilibrio ecológico permanente que facilita que se produzca la perforación. Estas bacterias potencialmente perjudiciales corresponden a la especie Streptococos mutans y estudios con probióticos apuntan a prevenir su colonización o a disminuir fuertemente su presencia en la boca, lo que podría disminuir en forma importante la probabilidad de desarrollo de caries.
Durante el Workshop de la Sociedad Española de Probióticos y Prebióticos (SEPyP) en 2013, nos ilustraron sobre como los probióticos pueden desarrollar un papel importante en la salud bucal si son capaces de incorporarse a los biofilms, crecer junto a la microbiota autóctona de la placa bacteriana y a la vez disminuir la colonización de microorganismos patógenos. Y para muestra un botón: En este estudio de 2009, 24 adolescentes sanos con tratamiento ortodóncico recibieron un yogur como vehículo probiótico durante 60 días (200 gramos diarios de yogur de frutas con una cepa de Bifidobacterium animalis) produciéndose una disminución significativa de la cantidad de Streptococos Mutans al término de la intervención.
To be continued
Fuentes:
The Oral Microbiota: Living with a Permanent Guest. ‘No man is an island, entire of itself’’ John Donne (Qué grande!): http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2768665/ The Human Oral Microbiome: http://jb.asm.org/content/192/19/5002.full.pdf+html Microbiota diversity and gene expression dynamics in human oral biofilms: http://www.biomedcentral.com/1471-2164/15/311#B4 The Placenta Harbors a Unique Microbiome: http://stm.sciencemag.org/content/6/237/237ra65 http://www.sacalalengua.org http://www.drhernanfuentes.cl/probioticos-en-salud-oral-la-esperada-vacuna-contra-las-caries/ Reduction of salivary mutans streptococci in orthodontic patients during daily consumption of yoghurt containing probiotic bacteria: http://ejo.oxfordjournals.org/content/31/4/407.long http://www.sepyp.es/es/wiki http://www.sepyp.es/es/workshop2014/edicionesEsperamos que os haya gustado
Un Saludo!